Sinopsis
Este libro hace una descripción de las distintas modalidades de carteras industriales, o en general formas de inversión en empresas desde una entidad. Aporta instrumentos de análisis y expone cuáles son las claves del éxito de una gestión.
Para el análisis es fundamental tener nociones de la consolidación contable, por lo cual hay un capítulo destinado a ello. También se detalla cómo se calcula a corto y a largo plazo la rentabilidad de una participación, y por extensión, la de un grupo de las mismas, y cómo se puede parametrizar el conjunto de las participaciones en términos de tamaño, liquidez, dinamismo y diversificación.
Como las mayores carteras industriales las tiene, y ha tenido, la banca, se dedican muchas páginas a describir su formación histórica, siempre ligada a la economía y a las finanzas de la nación, con qué principios estratégicos y de gestión se han dirigido y cómo les afecta la normativa del Banco de España.
Tras el análisis vienen los casos prácticos con el estudio en distintas épocas de las carteras industriales de bancos y cómo éstas han jugado un papel trascendental para salvar o potenciar la rentabilidad de los grupos consolidados. El resultado en términos de rentabilidad es sorprendente.
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