Sinopsis
En otro tiempo España estuvo al frente de las naciones, en cuanto a    títulos de posesión y conquista, en lo que geográficamente fue medio   mundo.Eso no sucedió por casualidad: al término de ocho siglos de      reconquista en la Península, los españoles llegaron al Nuevo Mundo     (1492), cuya ulterior conquista y dominio no fue ningún milagro, sino  un hecho histórico bien conocido pero no suficientemente valorado por  propios y ajenos.
                                                Los gestores de esa gran expansión fueron, en su mayoría, gente del    pueblo que, más allá del oro y la gloria, buscaban emular a sus héroes  de libros de caballería, dejando sus nombres para la Historia;        generaciones asombrosas de navegantes, conquistadores,                 cristianizadores? que además no operaron con pólvora del rey, sino con  su propia financiación convenida en capitulaciones muy precisas.
                                                                     España tuvo un proyecto de globalización histórica entre los siglos    XVI y XVIII que alcanzó sus puntos álgidos en las Américas, así como   en todo el inmenso Océano Pacífico (Molucas, Filipinas, Carolinas,     Marianas, archipiélagos del Sur), que, durante muchas décadas,         configuraron el llamado Spanish Lake.
                            Ese mismo Pacífico está hoy en disputa más que nunca, entre las dos    superpotencias. Como en 1494, tendrán que ponerse de acuerdo ?la idea  de muchos politólogos?, con un nuevo tratado al modo de Tordesillas    que, ciertamente, no debe dar paso no a una nueva hegemonía de riesgo  planetario, sino a un mundo multipolar en busca de la paz perpetua.